Es una terapia que consiste en la aplicación de un masaje mediante el empleo de diversos utensilios de madera de diferentes tamaños y formas, especialmente diseñados para que se adapten a las distintas zonas del cuerpo.
El objetivo es reafirmar y modelar la figura. Cada sesión dura alrededor de 20 minutos y se recomienda un ciclo de 15 sesiones, notándose los cambios a partir de la tercera.
El masaje consiste en preparar la piel y remover la grasa acumulada para, a continuación, aplicar aceites esenciales con propiedades reductoras y volver a masajear al paciente. Para finalizar, se realiza el masaje con los accesorios de madera.